Te lo deberías repetir hasta el infinito como un mantra irrenunciable: la mala publicidad tiene consecuencias.

Antes de hacer las cosas mal o hacerlas sin seguir un criterio definido debes apostar por hacerlas con profesionales que te van a ayudar a no dar un traspié de consecuencias incalculables: apuesta por contratar una agencia de comunicación o una agencia de marketing digital si quieres avanzar con paso seguro y no incurrir en uno de los enemigos más perniciosos a los que te enfrentas: la mala publicidad.

Pérdida de confianza

La mala publicidad puede originarse a partir de una mentira expuesta o una inexactitud. En ocasiones la publicidad es usada para impulsar las capacidades de las empresas, así como las expectativas de los clientes. Dichas expectativas pueden ser exageradas por descuido o reveladas como falsas en forma de mala publicidad, conduciendo a la decepción y la pérdida de confianza en la empresa.

Cuando en tu negocio no cumples con las promesas, tanto los clientes como los socios e incluso los propios empleados, son más propensos a cuestionar la veracidad de todos los mensajes actuales y futuros de la empresa. Recuperar la confianza perdida puede ser muy complicado y requerir de mucho tiempo. Incluso, esa desconfianza que se expresa de boca en boca y a través de las redes sociales, puede tardar años en repararse.

Efectos de la mala publicidad en las ventas

En términos generales, la mala publicidad tiene un impacto negativo y directo en las ventas. Si bien es cierto que aquellas empresas que son prácticamente desconocidas en ocasiones pueden experimentar un auge en los negocios luego de una mala publicidad, en realidad son la excepción. La mala publicidad perjudica el éxito en el largo plazo de las empresas que ya están establecidas. Además, la accesibilidad al producto puede disminuir si se tiene una mala publicidad, por lo que los potenciales compradores podrían tener menos oportunidades de comprar esos productos.

Daño en el valor de  la marca

El valor de marca también puede experimentar efectos negativos en el largo plazo como consecuencia de una mala publicidad. Esto es particularmente notorio en las empresas que deben retirar sus productos debido a la seguridad o riesgos para la salud. Cuando esto sucede, incluso si solo se ha retirado una parte de la oferta de un producto, es probable que los compradores eviten la marca en conjunto durante algún tiempo.

Percepción de marca

La percepción de marca es un concepto que hace referencia a las actitudes y sentimientos profundamente arraigados, que un cliente tiene con respecto a un producto o empresa. Cuando la percepción de marca es negativa, los consumidores son más propensos a tener actitudes negativas. Las consecuencias de la mala publicidad puede contribuir con una percepción de marca negativa, lo que a su vez puede reducir las ventas durante un periodo de tiempo.

Al final es importante tener en cuenta que ciertamente es posible construir una buena reputación para la empresa, no solamente en una escala local, sino también a nivel internacional. El problema está en que hacerlo puede ser una tarea cuesta arriba, especialmente cuando se tiene una mala publicidad asociada al negocio. En ocasiones, una mala publicidad únicamente puede ser eliminada con el paso del tiempo.